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sábado, febrero 25, 2006

DECLARAN MUERTOS A MINEROS MEXICANOS

Domingo, 26 de febrero de 2006 - 02:08 GMT
Mariusa Reyes
Enviada especial a San Juan de Sabinas, Coahuila


Ya es oficial lo que muchos temían desde el primer día que ocurrió la tragedia en la mina Pasta de Conchos, en el norteño estado de Coahuila: no hay sobrevivientes entre los 65 mineros que quedaron atrapados allí desde hace una semana.

Ya es oficial lo que muchos temían desde el primer día que ocurrió la tragedia en la mina Pasta de Conchos, en el norteño estado de Coahuila: no hay sobrevivientes entre los 65 mineros que quedaron atrapados allí desde hace una semana.

El anuncio fue hecho por autoridades estatales, nacionales y directivos de la empresa propietaria de la mina, Grupo México Industrial Minero quienes este sábado ofrecieron una conferencia de prensa, en la que informaron que, definitivamente, ninguno de los mineros atrapados sobrevivió a la explosión que se produjo en el interior de la mina.
Luego de dar lectura a un comunicado que abundaba en detalles técnicos, el presidente de la empresa, Javier García de Quevedo respondió a preguntas concretas de la prensa sobre si había personas aún con vida dentro de la mina.

"No hubo posibilidades de sobrevivencia después de la explosión de metano que ocurrió en el interior de la mina", dijo García de Quevedo.

El alto ejecutivo de la empresa dijo que aún no han recuperado ninguno de los cuerpos de los mineros, y que todavía las condiciones dentro de la mina no son adecuadas como para reiniciar las labores de búsqueda por parte de los trabajadores de rescate.

Rescate de los cuerpos

García de Quevedo aseguró que la empresa haría todo el esfuerzo necesario para efectuar el rescate de los cuerpos lo más pronto posible, una vez que se pueda ingresar de nuevo a la instalación minera.

La noticia final sobre la suerte de los 65 mineros atrapados, provocó fuertes reacciones entre los familiares de estos hombres, quienes han esperado con angustia y dolor saber de sus seres queridos.

Al darse a conocer la información, hubo familiares que colapsaron después de casi ocho días en que mantuvieron bajo control altísimos niveles de nervios y tensión.